Sinceramente, no tengo ganas de llorar esta tarde... Pero, estoy sola, y en todas estas horas no ha habido nadie para alegrarme. Y ni la persona con la que más podía contar en estos momentos está conmigo... Sola. Sola. Sola. Llevo 9 horas y media completamente sola.
No lo veo normal. Quizás sea que estoy más sensible que nunca en estos instantes. Y que esta mentira, tan pequeñita que me has hecho, para mí eso significa mucho mucho. Más de lo que te imaginas.
Sigo sola, no hay nadie en mi casa, ni siquiera mis padres, y estoy escuchando mi canción favorita, esa que he escuchado un trillón de veces y me sigue gustando, esa con la que estoy llorando ahora mismo.
Y te he vuelto a colgar el teléfono, porque me has vuelto a mentir, y sabes que no lo soporto. Y más motivos tengo para llorar ahora.
Me falta tanta gente... Y sé que no consigo nada llorando, pero no soy de piedra, y ahora no sé por qué extraña razón todo me afecta mucho más.
Y es que esa persona que me cambiaba los pañales, me daba la comida y me decía que era su tesoro ya no está conmigo, y sé que nunca lo volverá a estar.
Y sé también que esa amiga tan importante está tan lejos.
Y sé que en esta tarde oscura sigo sola, llorando, mientras oigo como llueve.
Me he dado cuenta de que hay momentos en la vida en los que te das cuenta de que no eres tan fuerte como crees,y echas de menos más que nunca a esas personas que te marcaron para siempre y no están.
Y quizás la pague contigo, lo siento, pero es mi manera de decirte la mierda de vida que tengo a veces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario